lunes, 7 de octubre de 2013

Diabetes y Lesiones de la Piel

Dermopatía Diabética

Múltiples y pequeñas placas rojizas o marronáceas que evolucionan dejando una zona atrófica e hiperpigmentada. Se localizan en la cara anterior de la pierna (zona pretibial). Se relacionan con la microangiopatía y neuropatía diabéticas siendo la más frecuente de las lesiones cutáneas. No precisa tratamiento.

Necrobiosis lipídica

Lesiones maculo-papulosas bien delimitadas de color rojo oscuro que tiende a extenderse centrífugamente evolucionando a placas cuyo centro de color marrón amarillento puede sufrir ulceraciones. Se localizan preferentemente en la región pretibial afectando ambas extremidades en más de la mitad de los casos. 

Afecta con preferencia a las mujeres en edades inferiores a los 40 años. Su tratamiento en general es poco satisfactorio y no parece que en su evolución influya el control de la glucemia. Si no existe ulceración, puede intentarse tratamiento con corticoides tópicos. En ocasiones se pueden intentar los injertos de piel.

Bullosis Diabeticorum (ampollas diabéticas):

Despegamientos cutáneos dermo-epidérmicos formando grandes ampollas de contenido claro rodeadas de piel sana. Se localizan en pies y manos, dejando en el curso de un mes una cicatriz residual. Es una alteración poco frecuente, que afecta principalmente a pacientes con diabetes mellitus Tipo 2 de larga evolución con mal control metabólico y con otras complicaciones tardías (neuropatía, retinopatía y arteriopatía). Su tratamiento es reposo, antisépticos y antibióticos tópicos y generales pues tiende a infectarse.

Alteraciones en el grosor de la piel

Engrosamiento de la piel del dorso de manos y pies:
Dicho engrosamiento se asocia a la limitación del movimiento de las articulaciones las manos (piel cérea y rigidez articular). Su aparición predispone al desarrollo precoz de retinopatía y nefropatía diabéticas. Aparece en las diabetes de comienzo juvenil y mejora mediante un estricto control de la glucemia.

Esclerodermia diabética

Engrosamiento e induración de la piel que comienza en la región cervical posterior y se extiende a la espalda y hombros con un curso crónico e indolente. Afecta a pacientes con una diabetes de larga evolución, obesos y con complicaciones vasculares coexistentes. No existe tratamiento efectivo.

Infecciones cutáneas del diabético

En general reflejan una diabetes mal controlada o no diagnosticada. Las más frecuentes son las infecciones micóticas (hongos) y las bacterianas.

  • Infecciones micóticas

La más frecuente es la Candidiasis infección producida por un hongo del género de las cándidas. Es una complicación frecuente en las diabetes mal controladas. 

Tiene distintas presentaciones:
Estomatitis angular (boqueras)
Candidiasis de la mucosa oral (müguet)
Paroniquia: infección de las uñas
Vulvovaginitis, favorecida por la presencia de glucosa en orina, causa más frecuente de prurito vulvar en la diabética 
Balanitis: inflamación del surco balano-prepucial del pene en varones; tiende a la cronicidad ocasionando una fimosis secundaria
Pie de atleta: infección micótica de los pliegues interdigitales ocasionando inflamación y fisuración de los mismos.

Como medidas generales, es aconsejable practicar prevención con un buen control de la diabetes, mantener una higiene corporal adecuada utilizando cremas emolientes y eliminar focos de humedad y maceración (calzados poco transpirantes, medias y calcetines con fibras sintéticas…). 

Igualmente es importante conocer el tipo de hongo responsable de la infección con el fin de utilizar el tratamiento local más adecuado: nistatina, derivados del imidazol, ketoconazol….

  • Infecciones bacterianas

Las más frecuentes son los forúnculos de repetición y las favorecidas por la angiopatía y neuropatía en partes acras (dedos de manos y pies).
Hacer hincapié en extremar las medidas de higiene en la práctica de punción capilar en dedos de la mano para la determinación de controles de glucemia capilar y el uso de calzado adecuado. 

En caso necesario, un tratamiento precoz con antibióticos tópicos y sistémicos, extremando el control de las glucemias por el riesgo de descompensación.

Alteraciones secundarias a la angiopatía


  • Manifestaciones derivadas de laxisquemia arterial
  • atrofia cutánea: piel fina y brillante
  • caida de vello en piernas
  • distrofia de uñas: anomalía en la forma y brillo de las uñas
  • frialdad acra y ausencia de pulsos distales

Alteraciones secundarias a la neuropatía autonómica

Ausencia de sudoración en extremidades inferiores ocasionando una piel seca (anhidrosis) por lesión de las fibras nerviosas simpáticas de las piernas. Precaución con la insensibilidad térmica en los pies que puede ocasionar quemaduras con el uso de agua muy caliente.

Sudoración compensatoria en cara y tronco. Sudan bastante de cintura para arriba, confundiéndose en ocasiones con cuadros de hipoglucemia.

La combinación de la angiopatía y neuropatía en las extremidades de las personas con diabetes, son las responsables del llamado pie diabético ocasionando úlceras indoloras y gangrena cutánea que en ocasiones puede acabar en amputación. Vigilar las uñas incarnadas y corregir con ortopedia los malos apoyos plantares, junto al uso de cremas emolientes e hidratantes que aseguren una piel intacta y un buen control de la glucemia, son los principales cuidados del pie diabético.

Siempre que aparezca una úlcera en el pie de un paciente diabético, acudir rápidamente a un especialista que pautará el tratamiento oportuno.

Otras dermopatías del diabético

Coloración amarillenta de las uñas: Principalmente en los dedos de los pies, de crecimiento lento, engrosadas y excesivamente curvadas. Se relacionan con alteraciones vasculares.
Xantomas eruptivos: Pequeños nódulos de 5 mm. de diámetro. Se relacionan con el mal control de la diabetes y con el aumento de los niveles de colesterol y triglicéridos. Desaparecen tras normalizar los lípidos.
Xantosis palmar: Coloración amarillenta de la piel debida a la acumulación de carotenos por incapacidad del hígado de convertir los mismos en vitamina A. Se relaciona con la ingesta excesiva de vegetales ricos en carotenos, especialmente zanahoria. 
Es más frecuente en varones con diabetes infanto-juvenil.
Xantelasma: Placas de color amarillento localizadas en regiones perioculares. Puede aparecer con o sin hiperlipemia.

jueves, 3 de octubre de 2013

Tipos de Diabetes

Diabetes Tipo 1

La diabetes tipo 1 es una de las enfermedades crónicas infantiles más frecuentes. Ocurre porque el páncreas no fabrica suficiente cantidad de insulina. 

Hasta hoy, se desconocen las causas exactas que dan origen a una diabetes tipo 1. Se sabe que existen una serie de factores combinados entre sí:

Factor genético: Se hereda la predisposición a tener diabetes, no la diabetes en sí. Sólo el 13% de los niños y adolescentes con diabetes tienen un padre o hermano con esta enfermedad. Sabemos que la causa no es totalmente debida a la herencia por los estudios que se han realizado en gemelos idénticos. Cuando un gemelo tiene diabetes tipo 1, sólo en la mitad de los casos el otro gemelo desarrollará la enfermedad. Si la causa fuese únicamente genética, ambos gemelos desarrollarían siempre la enfermedad.



Autoinmunidad: Normalmente, el sistema inmune protege nuestro cuerpo, pero en determinadas enfermedades como la diabetes, el lupus, artritis, etc., el sistema inmune se vuelve contra nuestro cuerpo. 
En el caso de la diabetes, se produce una reacción contra las células productoras de insulina. La forma de evidenciarlo en sangre es midiendo los anticuerpos. Estos anticuerpos suelen desaparecer de la sangre de forma progresiva después del diagnóstico de la diabetes.

Daño ambiental: Este factor puede ser un virus, tóxicos, algo en la comida, o algo que todavía desconocemos. Es el puente entre el factor genético y la autoinmunidad.

La forma de desarrollar la enfermedad sería la siguiente:
Una persona hereda la predisposición a padecer diabetes.
Esta tendencia puede permitir a un virus o a otro factor lesivo dañar a las células beta.
Las células beta dañadas al cambiar no son reconocidas y el cuerpo reacciona produciendo anticuerpos contra parte de esas células.
Se activan los glóbulos blancos que se dirigen al páncreas y lesionan más células beta.
Sabemos que la mayoría de las personas que desarrollan diabetes no lo hacen de un día para otro. Se trata de un proceso que puede durar años, incluso iniciarse desde el nacimiento. 





Diabetes tipo 2

La diabetes tipo 2 es la forma de diabetes más frecuente en personas mayores de 40 años. Se la conoce también como diabetes del adulto, aunque está aumentando mucho su incidencia en adolescentes e incluso preadolescentes con obesidad. En este tipo de diabetes la capacidad de producir insulina no desaparece pero el cuerpo presenta una resistencia a esta hormona. En fases tempranas de la enfermedad, la cantidad de insulina producida por el páncreas es normal o alta. Con el tiempo la producción de insulina por parte del páncreas puede disminuir. 


Causas
Factor genético o hereditario: La diabetes tipo 2 tiene mayor riesgo hereditario que la tipo 1. En casi todos los casos un padre o un abuelo tienen la enfermedad. En el caso de gemelos idénticos, si uno tiene la enfermedad, el otro tiene un 80% de posibilidades de desarrollarla.

Estilo de vida: El 80% de las personas que desarrollan diabetes tipo 2 tienen obesidad y no tienen una vida muy activa. El restante 20% a menudo tienen un defecto hereditario que causa resistencia a la insulina.

Diagnóstico
Las personas con diabetes tipo 2 pueden estar años con la glucosa alta sin tener síntomas de diabetes. Muchas veces el diagnóstico es casual al realizarse un análisis de sangre o de orina por otro motivo. La poliuria, polidipsia, polifagia, fatiga y pérdida de peso características de la diabetes tipo 1 también pueden estar presentes.

Tratamiento
Al igual que en la diabetes tipo 1 es importante que la familia aprenda lo máximo posible de la enfermedad. Al comienzo de la diabetes ésta se podrá controlar en muchas personas con cambios en el estilo de vida que incluyen una dieta normo o hipocalórica y ejercicio físico diario. Es importante que los cambios en el estilo de vida se realicen en toda la familia ya que así entre todos ayudaremos al adolescente o niño a aceptarlos mejor. 

Los controles de glucemia capilar son muy importantes aunque no se esté utilizando insulina como tratamiento. El mínimo recomendado son tres-cuatro al día. Los objetivos serían tener una glucemia en ayunas < 120mg/dl y a las dos horas de las comidas < 140mg/dl. 

Si con estas medidas no se consigue tener un buen control metabólico se añadirán pastillas (Antidiabéticos orales) o insulina. Existen diferentes tipos de antidiabéticos orales, los más utilizados son:

Metformina: Actúa reduciendo la liberación de glucosa del hígado. Puede ayudar a perder peso ya que disminuye el apetito. Los principales efectos secundarios son malestar de estómago, náuseas y diarrea.

Rosiglitazona y pioglitazona: Aumentan la sensibilidad a la insulina. Sus principales efectos secundarios son congestión nasal, dolor de cabeza, problemas hepáticos y ganancia de peso.

Sulfonilureas: Estimulan al páncreas para producir más insulina y por tanto tienen riesgo de producir hipoglucemia.

Repaglinida: Estimulan la liberación de insulina pancreática, se administran antes de las comidas.
Acarbosa. Retrasa la digestión de los hidratos de carbono. Puede producir flatulencia y dolor abdominal.

La insulina es otra opción terapéutica en las personas con diabetes tipo 2. Si al debut de la enfermedad hay cuerpos cetónicos se precisará tratamiento inicial con insulina. Durante periodos de enfermedades intercurrentes, muchos diabéticos tipo 2 necesitarán pinchazos de insulina. Según la enfermedad progresa muchas personas con diabetes tipo 2 precisarán insulina. 



Diferencias entre diabetes tipo 1 y 2

Los dos tipos de diabetes son muy diferentes.

En la diabetes tipo 2 se asocian dos alteraciones: una disminución de la acción de la insulina, con una alteración de la función de la célula beta que inicialmente es capaz de responder con un aumento de la producción de insulina (de ahí que los niveles de ésta estén elevados o normales con el fin de compensar el déficit de su acción) pero posteriormente la producción de insulina se va haciendo insuficiente. 

Sin embargo en la diabetes tipo 1 la alteración se produce a nivel de las células beta, por ello los niveles de insulina son muy bajos. 

Por ese mismo motivo los niveles de péptido C (que se segrega junto a la insulina) son normales o altos en la diabetes tipo 2 y en la tipo 1 suelen estar muy disminuidos. 

Los anticuerpos antiinsulina, antiGAD, IA2 e ICAs son positivos en la diabetes tipo 1, en la tipo 2 están ausentes. 

La forma de debut de la enfermedad también es diferente. El 50% de los pacientes con diabetes tipo 1 debutan con cetoacidosis, sólo el 25% de los tipo 2 lo hacen de este modo. 



Otros tipos de diabetes

Diabetes MODY (Maturity Onset Diabetes in the Young): Se produce por defectos genéticos de las células beta. 
Existen diferentes tipos de diabetes MODY, hasta la actualidad se han descrito 7. Se deben a un defecto en la secreción de insulina, no afectándose su acción. Se heredan de manera autosómica dominante, por ello cuando una persona tiene diabetes MODY es habitual que varios miembros de la familia también la padezcan y en varias generaciones.

Diabetes Relacionada con Fibrosis Quística (DRFQ): La fibrosis quística es una enfermedad que afecta a múltiples órganos entre ellos al páncreas, esto conlleva que se pueda desarrollar diabetes. El diagnóstico de la enfermedad se suele realizar en la segunda década de la vida.

Diabetes secundaria a medicamentos: Algunos medicamentos pueden alterar la secreción o la acción de la insulina. Los glucocorticoides y los inmunosupresores son algunos de ellos.

Diabetes gestacional: Intolerancia a la glucosa que se produce durante el embarazo que puede ser debida a múltiples causas.




lunes, 30 de septiembre de 2013

Cura tu Diabetes


Para combatir la diabetes deberás tomar el hábito de alimentarte realizando entre cinco y seis comidas leves al día.



Desayuno, almuerzo, cena y un pequeño entremés entre cada una de ellas. 
Lo más aconsejable en estos casos es comer cada dos horas para mantener estable el nivel de azúcar en la sangre.

Consejos Para Combatir La Diabetes

Evita La Sal: Reduce el consumo de sal, en tu lugar puedes sustituirla por especias y hierbas aromáticas.

Modera el Consumo De Carne: Evita los alimentos que contienen azúcar. Consume barras de cereales sin azúcar y galletitas que se venden en las dietéticas. 

Remplaza los dulces por el consumo de frutas: Consume alimentos con fibras solubles, verduras, avena y frutas. 
No consumas alcohol porque perjudica la manera en que el organismo regula la producción de azúcar.
Bebe mucha agua. Lo ideal es que consumas un mínimo de tres litros de agua al día.

La clave para combatir la diabetes es la buena alimentación y la misma no sólo reside en los alimentos, sino que además es significativo saber cuánto, cuándo y qué tipo de alimentos debes consumir. 

La dieta de cada persona varía según el género, la naturaleza o el estilo de vida que llevas. Sin embargo, se recomienda consumir entre 1,400 y 2,000 calorías cada día incluyendo todos los tipos de alimentos: Frutas, Carbohidratos Y Verdura. 

Este grupo de alimentos deben componer entre el 40 y el 60 % de los alimentos que ingieras a diario, elije los granos enteros, cereales con fibras, pan integral, frutas frescas y vegetales, y evita los alimentos procesados. 

Es recomendable consumir entre cada comida dos o tres raciones de carbohidratos complejos (pastas, cereales y pan), una o dos de fruta y una o dos de verdura.

Lácteos y Proteínas: Los diabéticos están más predispuestos a padecer de enfermedades cardíacas, es precisamente por esta razón por la que debes preferir proteínas magras y lácteos bajos en grasa. 

Lo ideal es que consumas dos raciones de lácteos al día, puedes optar por un vaso de leche o un vaso de yogur y también consumir dos porciones de carne baja en grasa preferentemente pescado o pollo.

Grasas y Azúcares: Lo ideal es que restrinjas el consumo de estos alimentos. También se recomienda que evites consumir edulcorantes artificiales ya que estos elevan los niveles de glucosa en sangre. 

Por otra parte, el consumo frecuente de este grupo de alimentos puede traer riesgos para su salud. 

Elije bien los alimentos que vas a incluir en tu dieta habitual y evita todos aquellos que contengan edulcorantes artificiales o naturales, como es el caso de los refrescos.

Acompaña La Dieta con Actividad Física: Para los diabéticos la actividad física es muy importante, tan importante como alimentarse bien. 
Asimismo el ejercicio debe estar adecuado al plan de alimentación que sigas, de este modo la práctica habitual de ejercicios te ayudará a disminuir el nivel de azúcar en sangre.


  • Alpiste El alpiste a pesar de ser una planta herbácea que se suele utilizar como alimento de las aves domésticas, también aporta grandes beneficios para las personas con diabetes. La manera de consumir el alpiste sería dejando unas cinco cucharadas del mismo en remojo durante la noche y; al día siguiente, licuar el alpiste remojado con un litro y medio de agua, bebiendo esta preparación a lo largo del día.
  • Cereales: Consume cereales, preferentemente integrales. Evita los bizcochos, magdalenas y galletas dulces.
  • Vegetales y Frutas: Consume a diario frutas y hortalizas, tanto cocidas como crudas. Ingiere frutas frescas en vez de jugos de fruta. Evita la fruta en lata o en jarabes, los almíbares y confituras a excepción de las elaboradas explícitamente para diabéticos que son las que no contienen azúcar. Las frutas como manzanas y las peras frescas son bajas en carbohidratos. Come muchas zanahorias, puedes mezclarlas con espinacas frescas, judías verdes, rábanos yogures, quesos bajos en grasa, panes integrales, etc.

miércoles, 25 de septiembre de 2013

La Diabetes y Trastornos del Sueño


Se calcula que entre el 38 y el 45% de los pacientes con Diabetes tipo 2 sufren trastornos del sueño. 

De hecho, la probabilidad de padecer Diabetes es dos veces mayor en aquellas personas que habitualmente duermen menos de 6 horas. 

Es decir, padecer Diabetes predispone a padecer trastornos del sueño, pero a su vez, dormir poco también predispone a padecer Diabetes

De hecho, en personas jóvenes y previamente sanas la restricción del sueño a 4 horas por día a lo largo de 6 días es de por si suficiente para reducir la curva de tolerancia a la glucosa y producir un estado hiperglucémico.


¿Por qué ocurre esto? 

Al dormir poco se elevan los niveles de cortisol y de hormona del crecimiento, y de hecho, ambas hormonas antagonizan los efectos de la insulina. Además, las personas que duermen poco tienen niveles más elevados de sustancias como TNF-alpha, Interleuquina-6, y proteína C-reactiva, sustancias todas ellas que aumentan la resistencia a la insulina.

Al dormir disminuye la secreción de leptina. Esta hormona, también llamada la hormona de la saciedad, favorece que las personas que duerman poco tengan propensión a la obesidad.

En suma, la falta de sueño aumenta la propensión a padecer Diabetes. Asimismo, para las personas que ya padecen diabetes, dormir poco empeora el pronóstico de la enfermedad.

El sueño se compone de 5 etapas; REM, y fases 1, 2, 3 y 4. 
Las fases 3 y 4, conocidas como “sueño lento o profundo”, se consideran las más reparadoras y directamente relacionadas con cambios metabólicos y hormonales. 

En estas fases se regulan los niveles de insulina, ya que en este momento el cerebro utiliza menos glucosa, la glándula pituitaria secreta menos corticoesteroides, la actividad nerviosa y muscular es menos activa, por lo que los requerimientos energéticos disminuyen. Como resultado, el organismo necesita menos energía y el metabolismo de la glucosa disminuye. Pasa lo contrario durante las primeras fases del sueño (fases 1 y 2), y fase REM, en las que hay más actividad nerviosa y más requerimientos energéticos.

Así pues, dormir bien ayuda al páncreas a regular los niveles insulínicos en sangre y es muy importante que la calidad del sueño sea buena todas las noches. 

Las personas que padecen Diabetes mellitus tipo 2 (DMT2) no tienen una buena calidad de sueño y sufren continuos despertares. Para evitar esta situación, es importante adquirir buenos hábitos y tener buena higiene al dormir.

Pero también es cierto que las personas que tienen Diabetes tienen mayores probabilidades de padecer de un Trastorno del sueño, tales como:
  • Síndrome de Apnea del Sueño: Consiste en ronquido nocturno severo acompañado de pausas respiratorias. Suelen ser personas obesas que durante el día tienen dificultades para mantenerse despiertos.
  • Síndrome de Piernas Inquietas: Son sensaciones molestas (con frecuencia, sensación de desasosiego) que se producen en las piernas por la noche, siempre que la persona afectada intenta permanecer en reposo.
  • Neuropatía diabética: Es una lesión en los nervios periféricos de las piernas y brazos que se produce de manera específica en la diabetes. Inicialmente solo se detecta mediante pruebas y exámenes específicos, pero conforme avanza, puede ir asociado a pinchazos, hormigueos, calambres y falta de fuerza y puede alterar el sueño.


viernes, 20 de septiembre de 2013

Consejos para Revertir la Diabetes

Para combatir la diabetes deberás tomar el hábito de alimentarte realizando entre cinco y seis comidas leves al día.

Desayuno, almuerzo, cena y un pequeño entremés entre cada una de ellas. 

Lo más aconsejable en estos casos es comer cada dos horas para mantener estable el nivel de azúcar en la sangre.

Consejos Para Combatir La Diabetes

Evita La Sal. Reduce el consumo de sal, en su lugar puedes sustituirla por especias y hierbas aromáticas.


Modera El Consumo De Carne. Evita los alimentos que contienen azúcar. Consume barras de cereales sin azúcar y galletitas que se venden en las dietéticas. 

Remplaza los dulces por el consumo de frutas. Consume alimentos con fibras solubles, verduras, avena y frutas. 
No consumas alcohol porque perjudica la manera en que el organismo regula la producción de azúcar.
Bebe mucha agua. Lo ideal es que consumas un mínimo de tres litros de agua al día.

La clave para combatir la diabetes es la buena alimentación y la misma no sólo reside en los alimentos, sino que además es significativo saber cuánto, cuándo y qué tipo de alimentos debes consumir. 

La dieta de cada individuo varía según el género, la naturaleza o el estilo de vida que lleva. Sin embargo, se recomienda consumir entre 1,400 y 2,000 calorías cada día incluyendo todos los tipos de alimentos.

Frutas, Carbohidratos Y Verdura: Este grupo de alimentos deben componer entre el 40 y el 60 % de los alimentos que ingieras a diario. Elije los granos enteros, cereales con fibras, pan integral, frutas frescas y vegetales, y evita los alimentos procesados. 

Eres recomendable consumir entre cada comida dos o tres raciones de carbohidratos complejos (pastas, cereales y pan), una o dos de fruta y una o dos de verdura.

Lácteos y Proteínas: Las personas con diabetes están más predispuestas a padecer de enfermedades cardíacas, es precisamente por esta razón por la que debes preferir proteínas magras y lácteos bajos en grasa. 

Lo ideal es que consumas dos raciones de lácteos al día, puedes optar por un vaso de leche o un vaso de yogur y también consumir dos porciones de carne baja en grasa preferentemente pescado o pollo.

Grasas Y Azúcares: Lo ideal es que restrinjas el consumo de estos alimentos. También te recomiendo que evites consumir edulcorantes artificiales ya que estos elevan los niveles de glucosa en sangre. 

Por otra parte, el consumo frecuente de este grupo de alimentos puede traer riesgos para su salud.

Elije bien los alimentos que vas a incluir en tu dieta habitual y evita todos aquellos que contengan edulcorantes artificiales o naturales, como es el caso de los refrescos.

Acompaña La Dieta Con Actividad Física: La actividad física es muy importante, tan importante como alimentarse bien. Asimismo el ejercicio debe estar adecuado al plan de alimentación que sigas, de este modo la práctica habitual de ejercicios te ayudará a disminuir el nivel de azúcar en sangre.

Alpiste: El alpiste a pesar de ser una planta herbácea que se suele utilizar como alimento de las aves domésticas, también aporta grandes beneficios para las personas con diabetes. La manera de consumir el alpiste sería dejando unas cinco cucharadas del mismo en remojo durante la noche y; al día siguiente, licuar el alpiste remojado con un litro y medio de agua, bebiendo esta preparación a lo largo del día.

Cereales: Consume cereales, preferentemente integrales. Evita los bizcochos, magdalenas y galletas dulces

Vegetales Y Frutas: Consume a diario frutas y hortalizas, tanto cocidas como crudas. Ingiere frutas frescas en vez de jugos de fruta. Evita la fruta en lata o en jarabes, los almíbares y confituras a excepción de las elaboradas explícitamente para diabéticos que son las que no contienen azúcar.

Las frutas como manzanas y las peras frescas son bajas en carbohidratos. Come muchas zanahorias, puedes mezclarlas con espinacas frescas, judías verdes, rábanos yogures, quesos bajos en grasa, panes integrales, etc.





miércoles, 18 de septiembre de 2013

Sanate Naturalmente "La herbolaria"

herbolaria chLa herbolaria ha sido desde la antigüedad un tema de gran interés debido a las propiedades  que se les atribuyen a las plantas curativas. 
Los remedios herbales siguen transmitiéndose  de generación en generación dando cuenta de una amplia diversidad de plantas que generan beneficios en el cuerpo.
Ésta se concibe como la práctica terapéutica que utiliza plantas medicinales; y cada vez viene tomando  mayor auge.
El uso de plantas medicinales también es muy frecuente en la cocina, incluso se han convertido en un ingrediente único no sólo para dar un sabor característico, sino para aromatizar y brindarle una presentación especial.  Son también de gran utilidad, con ellas se pueden preparar exquisitas salsas, ensaladas o los tradicionales remedios caseros.
La herbolaria incluye la utilización de toda la planta o solo de ciertas partes de ella; por ejemplo, las flores, fruta, semilla, vástagos, madera, corteza, raíces, rizoma, etc. Aspic Instituto Gastronómico, comparte información de algunas hierbas, sus beneficios y cómo pueden integrarse en un platillo.
Chicoria
La Chicoria contiene mucha agua y muy pocas calorías, también hidratos de carbono y Fibra. Es ideal para quienes quieren bajar de peso. Contiene: Pro vitamina A y B1, B2 en menor cantidad; minerales como el potasio, fósforo, calcio, magnesio, hierro; y otros como beta-carotenos, ácido oxalático, a. ascórbico, a. chicorésico, a. isoclorogénico, a.linoleico, a. alcalinoleico, a. esteárico, a. mirístico, a.palmítico, a.oléico. Inulina, cicoria, Lactucina, lacturopricina, Aminoácidos.
Está recomendada para la circulación sanguínea, lombrices y gusanos intestinales, como diurético, laxante suave, depurador, ayuda a digerir bien. Para la visión, cabello, uñas, piel, mucosas, huesos, dientes. Contra la insuficiencia hepática, problemas cardiovasculares y degenerativos, anorexia, tránsito intestinal, cistitis (inflamación de la vejiga) e hipertensión.
Hierba Buena
Ayuda a que los alimentos tengan buena digestión y se aprovechen bien. Es antiespasmódica, ya que activa la producción de bilis por parte de la vesícula biliar.
Carminativa, actúa ayudando a eliminar gases del tubo digestivo (combate meteorismo); anti inflamatoria, ayuda a desinflamar órganos y tejidos inflamados, por lo que es una excelente amiga en casos de colitis, gastritis, enfermedades articulares; antiséptica, en uso extrerno, la hierbabuena ayuda a limpiar aftas, úlceras, a sanar heridas, etc; analgésica, ayuda a relajar y a calmar el dolor; relajante emocional, es muy útil  en casos de excesivo estrés, presión, nervios alterados, desesperación, ansiedad, etc; muy benéfica para resolver casos de diarrea, tanto en pequeños como en adultos; antidismenorreica: por su composición química, la hierbabuena resulta muy eficaz para tratar casos de menstruaciones dolorosas; también es efectiva en casos de mareos, para expulsar parásitos intestinales y muy útil en casos de quemaduras, aplicando compresas de hierbabuena sobre la zona afectada. Las compresas se elaboran con dos cucharadas de té de hierbabuena y dos de aceite de oliva. Mojar una gasa y aplicar sobre la zona dañada.
Jengibre
Expectorante, estimulante gastro-intestinal y del sistema nervioso central y autonómico, antioxidante, protector de la mucosa gástrica, analgésico, antiemético, afrodisíaco, aromático, carminativo, diaforético, tónico, rubefaciente, estomáquico, caliente, analgésico, antireumático, relajante muscular, inhibidor de COX-2, vasodilatador, regula el azúcar en la sangre de pacientes con diabetes.

Hoja Santa
Se emplea en padecimientos como inflamación, infección de la matriz, para después del parto (para ayudar a la recién parida), como galactógeno y para acelerar el parto; dolor de estómago o espasmo, falta de apetito y estreñimiento. Su uso también se indica en enfermedades como asma, laringitis, reumatismo, en llagas, riñones, para la vista, purificar la sangre, en mordeduras de víbora, inflamaciones, dolores musculares, cólicos, para dar baños a los recién nacidos, para el pujo, contra las lombrices intestinales, el susto y para quemaduras.


lunes, 16 de septiembre de 2013

Diabetes y Obesidad

¿La obesidad puede provocar diabetes?

La diabetes es uno de los mayores males en la actualidad. 


Los investigadores aún no han entendido por qué algunas personas desarrollan esta condición y otras no. Sin embargo, está claro que el estilo de vida y ciertas costumbres negativas de salud pueden incrementar el riesgo de padecerla.

Una de estas malas costumbres es el exceso de alimentación. 

Tener sobrepeso o ser obeso es uno de los factores de riesgo más comunes para padecer diabetes tipo 2. 

Más del 80% de las personas con diabetes tipo 2 tienen sobrepeso o son obesas. Y es que entre más tejido graso se tenga, habrá más resistencia por parte de las células de los músculos y tejidos a la insulina.

¿Por qué es importante controlar el peso?


Tener sobrepeso puede elevar los niveles de glucosa en sangre, colesterol y provocar una presión sanguínea alta. 


Bajo estas circunstancias, se eleva el riesgo de sufrir problemas cardíacos y circulatorios. Si la persona con diabetes tiene un exceso de peso alrededor de su abdomen y no tanto en sus caderas, es posible que desarrolle dichas complicaciones.

El peso puede influir en lo fácil que resulte el control de la diabetes y hasta puede suponer una diferencia respecto al tipo y la dosis de cualquier medicación que la persona se administre.


Con solo perder un poco de peso, el nivel de glucosa se podrá controlar más fácilmente y descenderán más rápido la presión sanguínea y los niveles de colesterol.


¿Qué provoca el sobrepeso en las personas con diabetes?


Algunas personas, especialmente quienes tienen diabetes tipo 2, padecen sobrepeso. Existen varias razones para ganar peso, entre ellas, algunos medicamentos o el mal empleo de los mismos:


  • Aplicarse más insulina de la necesaria
  • Algunos medicamentos para hacer descender la glucosa en sangre pueden producir aumento de pesoConsumir más calorías de las que se necesitan
  • No hacer actividad física



No obstante, si no existe sobrepeso, es posible que la persona afectada quiera recuperar parte del peso que se perdió con la enfermedad o mantenerlo dentro de los límites saludables.


La actividad física como medida de prevención


Mientras menos activo se es, hay más probabilidades de padecer diabetes. La actividad física ayuda a controlar el peso, utiliza el azúcar como energía, hace más sensibles a las células a la insulina, incrementa el flujo de sangre y mejora la circulación.


Otro beneficio es que también aumenta la masa muscular. Este aspecto es importante puesto que la mayor parte de la glucosa es absorbida por los músculos y utilizada como energía.


Perder peso es algo posible, basta con comer menos y hacer más ejercicio. Es importante tener fuerza de voluntad y marcar objetivos realistas que ayuden a dejar cualquier mal hábito, lo cual puede hacerse realidad más tempranamente y de forma segura apoyándonos en un nutriólogo profesional.